Sólo se piensa que de la planta cannabis sativa se obtiene únicamente sustancias psicotrópicas como la marihuana y el hachís, pero lejos de eso, desde hace miles de años, esta planta se ha utilizado con fines terapéuticos. Siendo actualmente cuestionados social y política, los efectos paliativos de los cannabinoides han sido probados y legalizados en algunos países.
El aceite de cáñamo no contiene el cannabinoide THC, y además es altamente beneficioso para el organismo por su contenido en ácidos grasos omega-3 y omega-6.
Aceite de cáñamo, fuente de salud
Así lo ha confirmado un grupo de investigación de Plantas Medicinales de la Universidad de Sevilla que analizó los efectos del consumo del aceite a través de ratones. La dieta basada en este alimento disminuyó la sensibilidad al dolor. Se descubrió que la grasa obtenida de las semillas de estas plantas contenía multitud de componente saludables.
Las consecuencias de una dieta con desequilibrios en las cantidades de omega-3 y omega-6 pueden derivar a problema de salud.El aceite de cáñamo aporta una cantidad proporcionada de ambos ácidos grasos poliinsaturados, por lo que resulta beneficioso a nivel cardiovascular y cerebral, además de regular el metabolismo del colesterol e inhibir la agregación plaquetaria por la acción de sus componentes minoritarios.
Por todo ello, los expertos concluyeron que el aceite de la planta del cannabis posee unas buenas características organolépticas, que son especialmente notorias si lo consumimos sin calentarlo.