Los cultivos hidropónicos siempre han estado relacionados con los cultivos de marihuana ya sean a nivel casero o comercial. El montar tu propio cultivo hidropónico supone una gran cantidad de conocimientos y sobre todo de inversión económica. Son muchos los riesgos que rodean este tipo de plantación, por lo que es necesario prepararse muy bien para empezar este tipo de cultivo.
Los cultivos hidropónicos están al alcance de cualquiera, pero avisados quedáis, necesitáis un nivel de preparación y de planificación. A continuación veremos los pasos más importantes a la hora de montarlos, aunque no quiere decir que sea un éxito, pero si sigues estas recomendaciones obtendrás un porcentaje mayor que si los omites.
Recomendaciones a la hora de comenzar tu cultivo hidropónico
¿Qué planta vamos a cultivar?
Puede ser la decisión más importante. La elección de la planta determina el posible éxito o fracaso de un cultivo hidropónico ya que se debe escoger una especie que se desarrolle en el ambiente del que disponemos.
¿Qué sistema de cultivo vamos a usar?
Este paso está ligado a la cantidad de dinero que queremos gastarnos y también al tipo de planta que quieremos plantar.
Diseñar y determinar los regímenes nutritivos
Una vez decidido los pasos anteriores, se debe planear un régimen nutritivo que tenga en cuenta las diferentes etapas de crecimiento y las características de asimilación de nutrientes de la planta que se quiere cultivar. No es lo mismo cultivar una planta como la lechuga, sin frutos, a cultivar una planta de marihuana de la cual esperamos unos frutos.
Simulacro a pequeña escala
Lo más importante a la hora de empezar un cultivo hidropónico comercial o un cultivo hidropónico de tamaño importante es realizar un estudio piloto a pequeña escala para ver si las propuestas hechas en los pasos anteriores si son en realidad viables bajo las condiciones ambientales propuestas.
Corregir los problemas y ampliar la primera fase
Una vez se realiza una prueba a pequeña escala se vuelve mucho más fácil el ver los errores que existen en la práctica. Si existen errores, se pueden corregir para evitar que al cultivar el doble de cultivo se produzcan el doble de errores.
Estos pasos no garantizan el éxito, sin embargo la probabilidad de fracasar disminuye significativamente cuando los problemas se aproximan de una manera organizada y con un plan en la cabeza.